IDEAS PARA DESPERTAR EL CORAZÓN

“IDEAS PARA DESPERTAR EL CORAZÓN”

Esta exposición significa un punto importante en mi obra.

La exposición se da en un momento muy especial de mi vida, en que nuevos planteamientos profesionales y personales surgen y viejas ideas, muy enraizadas, vuelven a tomar fuerza.

Los 10 últimos años de trayectoria artística han estado “empapados” de la figura del elefante. El elefante ha sido mi compañero simbólico y espiritual en todo este tiempo. Me ha hecho recordar la nobleza de corazón, el poder espiritual, la ternura, una ternura grande, rugosa, áspera, primitiva, tal como la piel y la forma del elefante son.

Después de un periodo de cambios en el alma, en la visión de las cosas y en la estructura de base psicológica, en que se han liberado enormes fuerzas espirituales y se han asentado otras fuerzas, ahora presento estos trabajos que por primera vez se muestran al público.
Es para mí importante que se presenten por primera vez en Puebla, ciudad donde crecí e inicié mi trayectoria artística hace ya años.

La temática de las obras es variada. Hay seres humanos, ángeles, seres imaginarios, ciudades, personas importantes para mí, animales, etc.
Las obras tienen títulos largos o muy largos, que están estrechamente relacionadas con las imágenes.
Para mí la pintura tiene un fuerte sentido poético y de esta manera, con estos títulos, he querido hacer aún más patente mi interés por la poesía, por la metáfora.

Tanto obras como títulos, hablan de cosas directamente relacionadas conmigo mismo, con mi vida, mi cosmovisión, mis intuiciones…
Mucho de todo esto está relacionado con mi preocupación por el mundo, con el momento presente que estamos viviendo todos en “nuestra casa” (el mundo), que veo que se desintegra y se desmiembra por momentos: ciudades contaminadas con seres humanos oscuros que se confunden con la contaminación, ratas que se pelean por un espejismo, un globo terráqueo que está a punto de estrellarse, etc.

Pero por otro lado está la esperanza, muchas veces traducida en el propio trabajo y esfuerzo por dar buenos deseos, por la apuesta de la inocencia (a pesar de los obstáculos y de la pérdida de la inocencia y la frescura en nuestra cultura), por el amor, por la conexión con la propia conciencia y el recuerdo de Dios, en definitiva por la fortaleza de la fragilidad en un mundo que sufre de muchos totalitarismos y cegueras que tienden a hacernos ciegos de espíritu.

Así que esta exposición apuesta por una “Inocencia Crítica”, una inocencia que se cuida y se atesora ante los peligros del tiempo presente, -la Edad de Hierro, e la cosmología hindú-, pero que a la vez es consciente de ellos y señala con un dedo casi infantil que las cosas importantes se están olvidando y se rebela con una voz de inconformidad y grita a través de estas imágenes y palabras.